El gusto por nuestro estilo de vida | Emplatado por Restaurante Le Fou
Vivimos tiempos en lo que toda va muy deprisa. Nuestras vidas están ocupadas con innumerables actividades, conectamos con infinidad de personas a través de redes sociales (muchas de las cuales tan siquiera hemos visto) y estamos inundados de información proveniente de todas partes... ¡¡Para perder en Norte!!
Estamos inundados de información proveniente de todas partes... ¡¡Para perder en Norte!!
Pero de repente todo se para. Nos mandan: confinados a casa durante 3 meses, a la mayoría de la población. Nos enfrentamos a nosotros mismos y nos quedamos con nuestra familia más próxima. Igual a mis casi 55 años soy todavía muy ingenuo, pero estoy convencido que muchos de nosotros nos hemos parado a pensar en qué es lo importante en nuestras vidas.
Y, entre las muchas cosas que nos han parecido pilares de nuestra existencia, han aparecido nuestro entorno, nuestra alimentación y nuestras costumbres alrededor de la gastronomía. Me explico. Al quedarnos en casa, hemos podido observar como la naturaleza recobraba su espacio natural. Así hemos visto animales que se escondían de nuestra vorágine, como zorros en la falda del Castillo de Sagunto, jabalíes en la playa del Puerto, etc...
Castillo de Sagunto
Luego, al cerrarse el comercio internacional, nos hemos fijado en nuestros agricultores, ganaderos, pescadores, productores de alimentos de todo tipo que tenemos cerca de nosotros, como amigos invisibles. Nos hemos dado cuenta de que, sin ellos, padeceríamos carencias insalvables.
Nos hemos dado cuenta de que, sin ellos, padeceríamos carencias insalvables.
También hemos echado de menos poder reunirnos con nuestra familia, amigos, compañeros de trabajo, etc....alrededor de una copa de vino y de una comida o cena.
Ahora que volvemos a una "nueva normalidad", no nos olvidemos de estos sentimientos que hemos experimentado. Apostemos por alimentos de calidad producidos cerca de nosotros, aunque haya que pagar un poco más o debamos esperar a la temporada adecuada para consumirlos.
Sepamos valorar los servicios de hostelería que nos permiten compartir con nuestros seres queridos momentos importantes en nuestras vidas, alrededor de una buena mesa, con buenos caldos.
Gran parte de nuestra cultura mediterránea consiste en esto.
¡¡Preservemos nuestro estilo de vida!!
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